Vistas de página en total

lunes, 10 de marzo de 2014

Sumampa y su gente

La entrada a Sumampa fue gratificante. Los Telares es un pueblo chato, triste y al hacer esos 47 kms de barro, arena y agua me imaginaba que lo que encontraría sería aún peor, pero me sorprendió una ciudad con mucha vida, más limpia que lo visto hasta ese momento y con toda su gente volcada al carnaval. Después de comer unas empanadas, caí en un hospedaje y le pregunté a Ricardo, su dueño, si conocía a algún vecino que se dedicara a la historia de esta región. Y sí, había un historiador, director del museo local, que además era su sobrino. Mauricio Villaroel me dedicó su tiempo y paciencia para responder las dudas e inquietudes  que le plantee sobre el pueblo abipón. También se tomó el trabajo de fotocopiarme material e indicarme personas que aportaron más luz sobre la desconocida historia del abuelo Natividad de Jesús. Cuando le dije que el nombre impuesto a mi abuelo debía ser cambiado, con una sonrisa me sugirió el de Alaykín y me contó quien fue ese abipón... tras mi silla, Alaykín (Natividad) se reía y pedía un vino.
 La Municipalidad de Sumampa, que organiza estas fiestas de carnaval me invitó a desfilar en el corsodromo... tardé como 3 segundos en aceptar.

 Aquí me largo a recorrer los 500 metros del "circuito". Mientras lo hacía, los locutores desde el escenario, contaban mi viaje y la razón de su fin en Sumampa. La gente aplaudía y me alentaba. Primero sonreí levantando el pulgar, luego saludé llevándome la mano al corazón y después lloré... y no sentí vergüenza


Después de mi desfile, me dediqué a admirar el colorido vestuario de los danzantes.... 

1 comentario:

  1. Amigo Raul,
    Me hace feliz ver que tu te sientes tan a gusto, que vives todo tan intensamente! Me siento feliz de verte tan bien. Me hace feliz ver que tu eres feliz!!!
    Cuídate mucho!!
    Tu amigo

    Ignacio

    P.D.: digan lo que quieran... aquí en Gallegolandia sigue la puta crisis!!!

    ResponderEliminar